El éxito de Blue Ghost en su misión lunar

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importancia de la colaboración entre empresas privadas y entidades gubernamentales en la conquista del espacio.

Diseño y Despegue

En el primer mes de 2025, el Blue Ghost despegó desde el Centro Espacial Kennedy, utilizando un cohete Falcon 9 de SpaceX. La misión estaba enfocada en desplegar diez investigaciones científicas y pruebas tecnológicas sobre el terreno lunar, como parte de la iniciativa de Servicios Comerciales de Carga Lunar (CLPS) de la NASA. Después de un recorrido de casi dos meses, el 2 de marzo, el Blue Ghost tocó suelo en Mare Crisium, próximo a Mons Latreille, en el lado de la Luna que es visible desde la Tierra.

En enero de 2025, el Blue Ghost fue lanzado desde el Centro Espacial Kennedy a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX. La misión tenía como objetivo entregar diez experimentos científicos y demostraciones tecnológicas en la superficie lunar, en el marco del programa Servicios Comerciales de Carga Lunar (CLPS) de la NASA. Tras un viaje de aproximadamente dos meses, el 2 de marzo, el Blue Ghost aterrizó en el Mare Crisium, cerca de Mons Latreille, en la cara visible de la Luna.​

Mientras permanecía en la Luna, el Blue Ghost realizó diversos estudios destinados a examinar el regolito lunar, investigar las propiedades geofísicas del terreno y observar cómo interactúan el viento solar y el campo magnético terrestre. Los equipos a bordo contaban con un aparato para medir la adherencia del regolito, un retroreflector lunar que permitía mediciones de distancia exactas y sondas térmicas para evaluar el flujo de calor debajo de la superficie lunar.

Durante su estancia en la Luna, el Blue Ghost llevó a cabo una serie de experimentos diseñados para analizar el regolito lunar, estudiar las características geofísicas de la superficie y explorar la interacción entre el viento solar y el campo magnético de la Tierra. Entre los instrumentos a bordo se incluían un dispositivo para caracterizar la adherencia del regolito, un retroreflector lunar para mediciones precisas de distancia y sondas térmicas para analizar el flujo de calor bajo la superficie lunar.​

Cierre de la Misión

Conclusión de la Misión

El 16 de marzo, al caer la noche lunar, el Blue Ghost perdió contacto debido a la falta de energía solar. La nave operó durante aproximadamente cinco horas en la oscuridad lunar antes de cesar sus comunicaciones, completando así su misión con éxito. Antes de finalizar, el módulo transmitió alrededor de 119 gigabytes de datos, incluyendo 51 gigabytes de información científica, que serán fundamentales para futuras misiones de exploración lunar y marciana.

Este hito resalta el papel creciente del sector privado en la exploración espacial, evidenciando que las compañías comerciales pueden aportar de manera significativa a la investigación y al desarrollo de innovaciones tecnológicas espaciales. Firefly Aerospace ha manifestado su deseo de seguir adelante con futuras misiones lunares, con el objetivo de llevar a cabo al menos un alunizaje anual en los años venideros.

Este logro subraya la creciente participación del sector privado en la exploración espacial, demostrando que las empresas comerciales pueden contribuir significativamente a la investigación y desarrollo de tecnologías espaciales. Firefly Aerospace ha expresado su intención de continuar con las exploraciones lunares, planeando realizar al menos un aterrizaje lunar anual en los próximos años.​

La misión del Blue Ghost no solo ha aportado datos científicos valiosos, sino que también ha establecido un precedente para futuras colaboraciones entre agencias espaciales y empresas privadas, impulsando la exploración y el desarrollo tecnológico en el ámbito espacial.

By Melissa Andreina Mendoza Araujo

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